jueves, 7 de marzo de 2013

STOP!



Reconozcámoslo, la situación se nos ha ido de las manos completamente. Que ni yo mismo sepa ahora exactamente el número de personas que se han suicidado porque iban a ser desahuciadas puede significar dos cosas: o que no esté informado, que puede ser (y como futuro periodista me dejaría en mal lugar), o que la situación es gravísima, que también puede ser. La verdad, no se el número exacto, y no me he atrevido a buscarlo. ¿Para qué? Aunque solo fuera una persona, esto es inadmisible. El hecho de que una persona se quite la vida porque le van a echar de casa es escalofriante, como lo es también que no le demos importancia o que cuando leéis estas líneas me tachéis de exagerado. A mi me pasaba igual hasta que te paras a pensarlo seria y tranquilamente y te asustas, porque hasta ese momento lo has visto normal y lógico.